¿Cuáles son los motivos por los que un bebé se despierta llorando desconsoladamente?
En ocasiones los padres se alarman y se preguntan porque será que su bebé se despierta a menudo llorando desconsoladamente. Están agotados porque es de continuo que su bebé se despierta muy a menudo llorando.
Hay varias razones por las que el bebé puede despertarse llorando a mitad de la noche. De hecho, cuando un bebé llora es para indicar a sus padres que algo anda mal. Llorar es una respuesta que tienen los bebés cuanto sienten una necesidad no resuelta. Ya sea hambre, calor o frío, escozor, fiebre, cólicos, suciedad, necesidad de movimiento, dolor, necesidad de compañía, etc. Es la forma que tiene tu bebé para enviarte mensajes y reclamar la atención para señalar que están en necesidad de tu ayuda para que acudan a atenderle o atiendan sus necesidades. El bebé se encuentra tranquilamente durmiendo y por impulso y de repente de buenas a primeras comienza a llorar desesperado. Son muchos los bebés que se despiertan y comienzan a llorar, algo que puede asustar o sorprender a los padres pero que podría tener varias razones.
Como hemos visto, es bastante frecuente que las bebés se despierten varias veces por la noche, sobre todo, en algunas rachas y por un tiempo. Luego van despertándose menos o se duermen más rápidamente, a medida que su sueño va cambiando, ciertos malestares desaparecen, se acostumbran a este entorno extrauterino y podemos ir introduciendo algunas rutinas.
¿Qué está tratando de decirte cuando llora desconsolado o llora en su sueño?
- Hambre
- Gases
- Pañal sucio
- Cualquier signo de enfermedad (Un bebé que tiene un resfriado o una infección en el oído podría despertar con más frecuencia de lo habitual)
- Habitación demasiado caliente o fría
- Calor y vínculo de su mamá.
- Necesidad de calmarlo en brazo por acostumbramiento
¿Qué podemos hacer para calmarlo y que deje de llorar sin parar?
1-Cambiar algunos hábitos propios
Por ejemplo, adaptar nuestro horario de ir a dormir al horario del sueño del bebé. Los bebés se adaptan fácilmente a las rutinas si las repetimos a diario. El sueño, las comidas, el baño, son rutinas que nosotros mismos vamos acomodando en función de la comodidad y de cómo es el bebé. Para él, la monotonía es sinónimo de seguridad. Con cariño, paz y amor será una de las técnicas que servirán para consolar a los bebés.
2- Contar con apoyo emocional
Cuando eres padre/madre, también necesitas que te “sostengan” a ti, ya que es un desgaste continuo el día a día. Sería importante buscar momentos de calma personal. Cada persona sabe la manera para poder desconectar para volver a conectar nuevamente con la crianza de vuestros hijos.
3- Buscar algo de información (sin llegar a la locura)
Leyendo algún libro, consultando con el servicio de pediatría, consultando a nuestras Salus, con algún grupo de crianza…
4- Comienza a enseñarle la diferencia entre el día y la noche
Empezar aproximadamente alrededor de las 2 semanas. Cuando está en alerta y despierto, juega con él, estimúlalo, mantén la casa y su habitación con mucha luz y ruidos. En la noche no juegues, no le actives, mantén luces apagadas y una luz muy tenue, nada de luces muy fuertes.
5- Considera a empezar una rutina para ir a la cama
Nunca es demasiado pronto para empezar una rutina. Puede ser algo sencillo, como poner el pijama, cantarle una canción de cuna, y darle un beso de buenas noches.
6 – Ir empezando un proceso para ayudar al bebé a dormir mejor
Es recomendable mantener cierta regularidad horaria. Acuesta a tu bebé, cada día, más o menos a la misma hora. Procura también despertarle más o menos a la misma hora. La rutina ayuda a los bebés a adaptarse a los cambios. Se recomienda que sea una rutina de lo más cariñosa y relajante. Ejemplo darle un baño con una música agradable, después su masaje y por último un abrazo un beso y despedirse con las buenas noches. Dejándole aún despierto en su cuna para que sea el mismo que se duerma por sus propios medios. Cada familia podrá ir construyendo su propio modelo. Dependerá mucho del temperamento, de la edad o ritmo de desarrollo del niño, del nivel de energía o probabilidad de los cuidados del bebé. (En ocasiones padres, cuidadoras, Salus, etc.)
Es importante no emplear el método Estivill ya que puede tener consecuencias. No dejando solo al bebé llorando y llorando desconsoladamente hasta que de su propio cansancio y agotamiento caigan de sueño. Tampoco alargar durante mucho tiempo el estar en contacto continuo con el cuerpo de la mamá bien por vínculo o usando el pecho como consuelo para que puedan dormirse. Cuanto más tiempo pase, el bebé estará habituado y más complicado va a ser para las madres el desvincularse de su bebé porque en cuanto le quites lo que más quiere te reclamará, y tienes que estar fuerte, preparada para ello.
7 – La importancia de las siestas durante el día
Hay que saber la importancia y consecuencias positivas de crear rutinas de siesta a los bebés. Las siestas les proporciona el tiempo de descanso que necesitan para crecer y reponer fuerzas. Es un excelente reparador natural Que aporta enormes beneficios Al organismo. Es por esto que además del sueño nocturno, durante los primeros años de vida se acostumbran a dormir en el día. Por ejemplo, una siesta de una hora por la mañana y de una hora y media por la tarde. Id probando según el ritmo de cada bebé y según sus necesidades para lograr que el bebé conecte con la tranquilidad imprescindible para dormirse sin engancharse a la teta, biberón o chupete. Otras opciones para consolar a los peques y que funciona súper bien son el porteo, los brazos lo Justo para alzarle y darle algún mimo, si no se adaptan con facilidad y luego necesitan eso cada vez que demandan. Y muy importante ofrecerles a sus amigos inseparables los Doudous, son trapitos de caricias suavecitos que les encantará acariciar y abrazar.
